River perdía su primer amistoso ante Gimnasia (J) en medio de una intensa lluvia de aguanieve. Pero en el final apareció Funes Mori y clavó un bombazo. El equipo de Cappa salvó la ropa, pero no dejó una buena imagen. Falta mucho...
Fue un empate y no mucho más que eso. Para Angel Cappa el resultado muchas veces es apenas una consecuencia en estos tipos de partidos, pero seguramente se habrá ido un tanto preocupado por la imagen que mostró el River versión segundo semestre de 2010. Es que este nuevo equipo no mostró demasiadas diferencias con lo que fue el equipo en el último campeonato. Dependió demasiado de las genialidades de Buonanotte, no lastimó en el área de Gimnasia y dio algunas ventajas cuando lo atacaron. Es la primera de las pruebas formales de Cappa, pero lo que quedó en claro es que falta laburo, y mucho…
Gimnasia armó un buen plantel para el próximo torneo de la B Nacional. Trajo entre otros a un viejo conocido que ya comenzó a pagar su confianza. Balvorín abrió el partido en el primer tiempo, aprovechando una distracción de la última línea Millonaria. Gimnasia con la ventaja manejó las instancias del juego y peleó cada pelota como si fuese la última. Jugó el partido con todo y por eso superó al equipo de Cappa. River fue muchos arrestos individuales, no tuvo conexión entre sus líneas y por eso dependió de una genialidad o de un error de los jujeños para empatar.
Y entre esas dos opciones estuvo el tanto que al menos le ahorró una derrota. Ferrari metió la pelota en diagonal, la defensa jujeña rechazó mal y para el centro y Funes Mori clavó un bombazo. Fue parda, poco para analizar futbolísticamente y mucho para corregir. Al menos la suerte en algo cambió…
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